Según la definición dada por el NIST (National Institute of Standards and Technology), el cloud computing es un modelo tecnológico que permite el acceso general, adaptado y bajo demanda en red a un conjunto compartido de recursos de computación configurables compartidos (por ejemplo: redes, servidores, equipos de almacenamiento, aplicaciones y servicios), que pueden ser rápidamente aprovisionados y liberados con un esfuerzo de gestión reducido o interacción mínima con el proveedor del servicio.
Algunas de las principales características del cloud computing son las siguientes;
El pago por el uso, el cliente solo paga por el uso del servicio o solución cloud contratada
Abstracción, ya que tiene la capacidad de aislar los recursos informáticos contratados al proveedor de servicios cloud de los equipos informáticos del cliente. Gracias a la virtualización, la organización que usa este servicio no requiere de personal dedicado al mantenimiento de la infraestructura, actualización de sistemas, pruebas y demás tareas asociadas que quedan del lado del servicio contratado.
Agilidad en la escalabilidad, puede incrementarse o disminuirse las funcionalidades ofrecidas al cliente, en función de sus necesidades puntuales sin necesidad de nuevos contratos ni penalizaciones. Igualmente, el coste del servicio asociado se modifica también en función de las necesidades puntuales de uso de la solución. Esta característica, relacionada con el pago por uso, evita los riesgos inherentes de un posible mal dimensionamiento inicial en el consumo o en la necesidad de recursos.
Multiusuario, las soluciones cloud permiten a varios usuarios compartir los medios y recursos informáticos, permitiendo la optimización de su uso.
Autoservicio bajo demanda, permite al usuario acceder de manera flexible a las capacidades de computación en la nube de forma automática a medida que las vaya requiriendo, sin necesidad de una interacción humana con su proveedor o proveedores de servicios cloud.
Acceso sin restricciones, ofrece a los usuarios acceso a los servicios contratados de cloud computing en cualquier lugar, en cualquier momento y con cualquier dispositivo que disponga de conexión a redes de servicio IP. El acceso a los servicios de cloud computing se realiza a través de la red, lo que facilita que distintos dispositivos, tales como teléfonos móviles, dispositivos PDA u ordenadores portátiles, puedan acceder a un mismo servicio ofrecido en la red mediante mecanismos de acceso comunes.
Dentro del cloud computing hay diferentes modelos de servicios cuyo uso dependerá de las características de los usuarios y que son los siguientes;
Infrastructure as a Service (IaaS) : Los clientes que optan por este tipo de solución cloud buscan un ahorro en sistemas TI o sea, buscan de la infraestructura informática (capacidad de computación, espacio de disco y bases de datos entre otros) como un servicio.
Platform as a Service (PaaS): Facilita el despliegue de las aplicaciones del cliente, sin el coste y la complejidad derivados de la compra y gestión del hardware y de las capas de software asociadas. Ofrece a través de redes de servicio IP todos los requisitos necesarios para crear y entregar servicios y aplicaciones web.
Business Process as a Service (BPaaS): Su característica principal es que los recursos utilizados mediante esta solución para ejecutar los procesos de negocio, son compartidos entre los diferentes clientes del proveedor. Es una solución que está en fase inicial
Software as a Service (SaaS): Quizás la más interesante por su amplitud de uso ya que desde un autónomo o profesional hasta empresas de cualquier tamaño pueden beneficiarse de esta solución cloud consistente en la entrega de aplicaciones como servicio, el proveedor ofrece licencias o alquileres de sus aplicaciones a los clientes bajo demanda de estos. Los proveedores de los servicios SaaS pueden tener instalada la aplicación en sus propios servidores web (permitiendo a los clientes acceder, por ejemplo, mediante un navegador web), o descargar el software en los sistemas del contratante del servicio. En este último caso, se produciría la desactivación de la aplicación una vez finalice el servicio o expire el contrato de licencia de uso.
Esta cloud solución puede orientarse a multitud de de clientes o usuarios según su condición por ejemplo las redes sociales (Facebook) o soluciones ofimáticas (Drop Box) son un ejemplo de uso entre particulares y a nivel profesional podemos citar ERP, CRM,RRHH, siendo estos recursos asequibles en estos momentos gracias a esta tecnología del cloud computing y al desarrollo de las cloud soluciones correspondientes.
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